martes, 27 de septiembre de 2011

Luisiana I

Lo último que sentí antes de recibir su mordedura fatal fue un terrible cosquilleo en la nariz. No sabía que los tigres también me provocaran alergia.

4 comentarios:

Ripser dijo...

Un "já" cínico.

Daniel Vila dijo...

mmmmmmm

Daniel Vila dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
J.J. González Haro dijo...

Lo de los tigres tiene que estar relacionado con la alergia a los gatos... aunque por tamaño tiene que ser aun mas incomodo...

Un saludo Manuel, como ves me paso por aqui tras conocerte en las jornadas de DH. Un saludo y te pongo en seguimiento desde ya.