martes, 17 de mayo de 2011

II

(Esta es una alucinación que tengo cuando mis pies se cansan)

Levemente, observando a la figura humana, me acabo de dar cuenta de su rectitud. ¡No puedo doblar mi cúbito ni mi radio! ¿Por qué no puedo hacerlo?

Y entonces pienso en las limitaciones de mi cuerpo. Tiene huesos; son rectos, ellos no se ondulan.

¡No se ondulan! Quisiera ser un pedazo de hierba, para ondularme al viento. Quizá hallase así una forma nueva de bajar las escaleras.

Mientras me imagino como un pedazo de hierba y mi brazo totalmente deforme, ondulando sin control, he creído escuchar en alguna parte, lejos de mi ensoñación, el fuerte crujido de ramas partirse...

¿O eran mis huesos?

2 comentarios:

Layne dijo...

El de ahí abajo también querría ser hierba

Ripser dijo...

Ondúlate, Greed!